Cómo cuidar tus pies de la resequedad

Aprende cómo cuidar tus pies de la resequedad con este post que Calzados Club Verde trae para ti. Con nuestros consejos lograrás tener la piel suave y sin imperfecciones. Esto evitará futuros daños y complicaciones mayores. Te invitamos a seguir leyendo para conocer más sobre este tema.

Analiza las causas de la resequedad

Es importante tener en cuenta la opinión de los expertos para entender cuáles son las causas de la resequedad. Muchos doctores, como especialistas en la materia, aseguran que las grietas en los pies tienen distintos factores que se deben analizar. Pueden ir desde lo más común como cambios climáticos bruscos hasta enfermedades relacionadas con el metabolismo.

Es necesario resaltar que el uso de calzado con la talla incorrecta puede ser uno de los principales problemas. Esto debido a la tensión anormal que genera el roce del zapato con tu piel, que puede causar ampollas en tus pies que debes tratar.

También ya sea sea por estar muy ajustado o muy suelto puede generar callosidad que es un símbolo inequívoco de la resequedad.

Los hongos en los pies pueden acelerar el proceso de la resequedad y viceversa. Es por ello que el cuidado preventivo debe ser prioridad. Asimismo, el uso de jabones o detergentes fuertes produce daños en la piel que pueden ser difíciles de tratar. Es necesario tener cuidado y prestar atención a todas las reacciones que pueda presentar tu piel con este tipo de químicos controlados.

Aunque la obesidad es causante de muchas enfermedades estas se pueden detectar en los talones. Las grietas en los pies pueden ser debido a la fricción anormal causada por el sobrepeso o síntomas claros de algún problema mayor. Debes estar al pendiente de todo lo relacionado con este tema para que no afecte tu salud.

La hidratación como método de prevención

La piel debe tener un cuidado especial ya que es la principal barrera protectora de nuestro cuerpo. Es por ello que debes mantenerla hidratada para evitar grietas que puedan causar daños mayores. Sigue nuestras recomendaciones para mantener la piel sana.

• Aceite de oliva. El aceite de oliva tiene grandes atributos que pueden ayudar a fortalecer tu piel. Para ello debes untarlo con un leve masaje en las zonas más propensas a sufrir resequedad como talones, tobillos y bordes externos del pie. Utiliza esta técnica por 15 minutos dos veces por semana.
• Cera de abejas. Es un poderoso producto natural que al utilizarlo de manera correcta no necesitarás de otros métodos. Para lograr resultados positivos debes colocar 1 cucharada de cera en baño de maría. Antes de aplicarlo en los pies puedes reforzar con un poco de aceite de oliva para mejorar su efecto. Aplícalo por 10 minutos al menos por cuatro días.
• Aceite de coco. Al tener un alto contenido de ácidos grasos el aceite de coco puede ayudar a evitar el problema de la resequedad. Es necesario aplicarlo de manera constante después de cada baño por un periodo de 20 minutos. Para mejorar resultados emplea esta técnica todos los días.
• Aloe vera o sábila. Este remedio natural tiene muchas ventajas por sus propiedades antioxidantes y antisépticas. Debes extraer el gel de una hoja y aplicarlo sobre las partes más vulnerables. 15 minutos todos los días será suficiente para ver los resultados en corto tiempo.
• Cremas humectantes. Aunque existen muchos remedios naturales para combatir este problema siempre puedes acudir a los productos farmacéuticos. El uso de cremas o lociones de manera constante te ayudará sin duda a revertir esta situación.

Cómo cuidar tus pies de la resequedad

Como ya dijimos la resequedad de los pies puede convertirse en algo más que un problema estético. Si es causada por los efectos secundarios de alguna enfermedad lo mejor es acudir a tu médico para analizar la raíz del problema. Si este no es tu caso puedes emplear tratamientos caseros que pueden ser muy factibles.

Elimina las grietas poco a poco

Hay muchas personas que cometen el error de tratar de eliminar el problema de la noche a la mañana. No existen tratamientos que hagan acelerar de tal manera el proceso y es por ello que debes tener paciencia. El secreto está en aplicar sesiones de exfoliación constantes para ir desapareciendo la resequedad.

1. Pon tus pies en remojo. Antes de hidratar o exfoliar tus pies es recomendable remojarlos por un periodo de 15 minutos. Para ello debes tener agua tibia en un recipiente y agregar vinagre o sal de Epsom que ayuden a remover la piel muerta. Es importante resaltar que no debes durar más de 20 minutos con los pies en remojo o los resultados serán negativos.
2. Exfóliate. Para remover la capa superficial de piel muerta es necesario usar una piedra Pómez o una esponja de lufa. Empléala con un movimiento circular por todas las zonas afectadas. Repite este proceso durante 5 minutos con cada pie.
3. Hidrata la zona exfoliada. Una vez terminado el proceso debes hidratar la piel. Esto ayudará a contrarrestar la perdida de humedad al momento de secar el pie. Evitando que aparezca la resequedad de manera notoria.

Utiliza calcetines de algodón

Las telas de algodón ayudan mucho cuando de resequedad se trata. En el caso de los calcetines permite que el pie respire y se seque rápido cuando sudas. Luego de hidratar los pies puedes colocarte los calcetines para acelerar el proceso.

También recuerda que debes cambiarlos todos los días. Esto es necesario evitar la aparición de hongos o infecciones en la piel tratada. Recuerda que la piel es vulnerable ante cualquier agente dañino y más después de un proceso de exfoliación.

Usa el calzado adecuado

La protección del pie ante climas muy extremos debe ser prioridad. Ya sea por veranos muy secos o inviernos con mucho frio nuestra piel puede verse afectada rápidamente. Es por ello que recomendamos analizar muy bien el tipo de calzado que usarás en determinada época del año.

Si bien es cierto que lo recomendable es usar calzado que permita que el pie respire a veces resulta contraproducente exponer la piel al aire. En las mujeres sucede mucho que los zapatos de tacón o con plataformas inclinadas ocasionen una fricción anormal. Es por ello que debes examinar bien si el uso del calzado es favorable para tus pies.

Hazte pedicura constantemente

Siempre es bueno saber hacer una pedicura en casa esta es importante para mantener la estética de los pies. Es recomendable hacerse un tratamiento una o dos veces al mes. Este método cosmético te ayudará a conservar el la limpieza y la hidratación necesaria si tienes resequedad en los pies.

Aunque la exfoliación forma parte de este tipo de tratamiento su función principal no es eliminar por completo la resequedad. Siempre es bueno complementar la pedicura con un proceso de eliminación mecánica de la piel muerta un poco más fuerte. Es importante acotar que si tienes alguna infección en las uñas o pie de atleta es mejor esperar que desaparezcan.

Evita largas caminatas

En caso de presentar fuertes síntomas de resequedad en los pies o xerosis es necesario evitar las caminatas prolongadas. Esto puede debilitar la piel ya dañada y apresurar la aparición de ampollas o lesiones severas. Aunque el uso correcto del calzado puede ayudar a evitar esto, no siempre es 100% efectivo.

Si tienes el hábito de caminar ya sea a tu trabajo o cualquier sitio, debes tener en cuenta que puede ser una mala elección si estás en pleno tratamiento para combatir la resequedad. Estar mucho tiempo de pie también puede influir negativamente en tu condición. Para anular los posibles daños recomendamos tomar descansos cada 15 minutos.

Visita periódicamente a tu médico

Si las técnicas de hidratación preventivas o los cuidados especiales no funcionan es necesario acudir a un médico especialista. Este te puede brindar otras alternativas para remediar este problema. Debes contemplar esta opción siempre y cuando sospeches que es una molestia que no puede ser tratada con métodos convencionales.

Debes estar al tanto de todos los avances o retrocesos en los tratamientos. Una visita periódica a tu podólogo puede evitar a tiempo la aparición de otro tipo de lesiones. Ya sea de manera superficial como en el interior. La precaución te dará muchas ventajas.

Beneficios del cuidado de los pies

Uno de los principales beneficios de mantener los pies cuidados es que puede mejorar tu salud en todo sentido. Ya sea por el diagnostico a tiempo de alguna enfermedad o simplemente por estética. Las ventajas que ofrecen no pueden ser evaluadas de manera sencilla. Sin embargo te daremos una pequeña lista de lo más importante.

• Evita molestias ocasionadas por la resequedad.
• Te mantiene aseado en todo momento.
• Ayuda a diagnosticar enfermedades.
• Aumenta tu autoestima.
• Te protege de otros males que originan la resequedad.
• Brinda seguridad al momento de lucir tus pies.

Saber cómo cuidar tus pies de la resequedad te evitará muchos problemas en tus pies. Siempre es importante comprar calzado de calidad, como los zapatos Clarks que puedes conseguir en nuestra tienda online.

Fuente infografía